El partido de oposición Convergencia para la Democracia Social (CPDS), denunció hoy al Gobierno de Guinea Ecuatorial por no hacer nada para evitar la muerte de cuatro personas, en varios incendios ocurridos este mes en el barrio Campo Yaundé, el más pobre de las afueras de la capital.
La formación política que lidera Plácido Micó, reveló en un comunicado difundido en su página de internet que 'aproximadamente un centenar de familias sin vivienda y un colegio convertido en escombros', ha sido el resultado de unos incendios que 'se producen a menos de cien metros de distancia del cuartel militar Acacio Mañe Ela, sede del cuerpo de bomberos'.
Acusó al presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, y su Gobierno de haber tomado la decisión de 'destruir Campo Yaundé para la construcción de viviendas privadas, cuyo precio no estará al alcance de los actuales residentes del barrio'.
'Es llamativo que el penúltimo incendio, del pasado día 10, se produjo dos días después de que el primer ministro del gobierno se reuniera con los vecinos del barrio para comunicarles la decisión ya tomada, pero sin decirles dónde serán realojados tras perder sus viviendas', agregó.
Señaló que 'las circunstancias hacen sospechar a los vecinos del barrio que se trate de incendios provocados de forma deliberada, con dos objetivos: provocar el pánico entre la población afectada (muchas familias abandonan ya sus casas por iniciativa propia para evitar ser las próximas víctimas) y poder iniciar las obras sin la oposición frontal de los desesperados vecinos'.
La formación socialdemócrata guineana dijo que las 'sospechas vienen avaladas por el hecho de que en todos estos siniestros la brigada de bomberos no ha movido un dedo y los sospechosos de haber provocado los incendios, una vez denunciados y detenidos han sido inmediatamente puestos en libertad por las autoridades'.
Al recordar que en un de los discursos Obiang advirtió que 'los que no son capaces de vivir en la ciudad, que se vayan a vivir en sus poblados', afirmó que 'la cruda realidad de Campo Yaundé viene a ilustrar la intención del presidente: la ciudad es para los ricos, y los únicos ricos son sus parientes y leales a su régimen. Que los pobres lleven su miseria a sus aldeas, lejos de la curiosidad del mundo'.
El principal partido de oposición parlamentaria condenó y rechazó la actuación del Gobierno, mientras exigió la construcción de 'viviendas sociales en un emplazamiento asignado a tal efecto, trasladar a los afectados a este lugar antes de destruir el barrio, y después edificar viviendas dignas'.
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